Estos dos músicos no precisan palabras para expresar lo que sienten que debe ser el camino para una renovación de la música argentina. Once pistas para entender dónde está lo nuevo, de la mano de Agustín Guerrero y Juan Martín Scalerandi.
Si bien la música instrumental habla por sí sola, el hecho de llamar a este disco repleto de nuevas piezas Nueva Música Argentina es toda una afirmación, no exenta de autoconvencimiento: una cosa es ser humildes y otra ignorar el propio valor. Estos dos músicos que están terminando su juventud recién (para los cánones actuales) entregan un disco en el que, alternando sus firmas, hacen un repaso por buena parte del mapa folklórico argentino, del tango, el vals y la milonga, a la vidala y el candombe, pasando por el malambo sureño y hasta un triunfo. Como se ve, predominan las especies rítmicas bonaerenses.
Agustín Guerrero es un pianista enérgico y atrevido, lleno de ideas, pero capaz del toque sutil cuando la pieza lo requiere. Juan Martín Scalerandi tiene swing y velocidad, impresiona cuando la música pisa el acelerador. Ambos se fusionan de tal modo que es muy difícil sin ver el tracklist adivinar de quién es cada música.
El dúo de piano y guitarra tiene una fuerte tradición en el tango, que es la escuela donde se formaron estos dos músicos. En particular el dúo Salgán - De Lío es un espejo hermoso en el que mirarse. Además de honrar esa tradición, hacia el final del disco hay un homenaje explícito de Guerrero, con la Suite Salgán, cuyos tres números, llamados sencillamente Tango, Vals y Milonga, son un punto altísimo de un disco sin valles.
Disco para escuchar a repetición, lleno de buen gusto, que renueva la tradición con atrevimiento (no faltan disonancias, armonías que aterrorizarían a más de un conservador) y que nos deja una extraña sensación: la de estar escuchando algo que es nuevo pero no completamente desconocido.
[Fuente: www.clubdeldisco.com - acceso al disco en Spotify: open.spotify.com/album/5FmHtv7wgeV4uPVkLyC6Ui
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