El 'selfie stick', entre los productos de electrónica más vendidos de España

El palo extensible para tomarse fotos se ha convertido en uno de los regalos navideños más populares del 2014

Solo en diciembre, las ventas los selfie sticks aumentaron más de un 400% en Amazon España

Por WAYRA FICAPAL

En la plaza de la Seu, justo delante de la Catedral de Barcelona, una pareja de turistas coge de su bolsa un palo extensible rosa y se saca un selfie. Justo unos metros más allá una familia de cinco miembros repite el mismo gesto y al otro lado una visitante asiática juega con su monopie a hacerse autofotos. Los llamados selfie sticks se han popularizado en muy poco tiempo hasta el punto de convertirse en una extensión natural de los smartphones.

Este producto nuevo, que se empezó a comercializar en 2014 con la idea de simplificar la experiencia de la autofoto, ha resultado ser uno de los regalos más populares durante las pasadas fiestas. “No sé cuántos hemos vendido, muchísimos”, destaca Alex, una dependienta del Natura de la calle Canuda, cerca del Portal de l’Àngel, que enfatiza: “Ha sido sin duda el regalo estrella de estas Navidades”.

“Si el 2013 fue el año en el que ‘selfie’ se convirtió en una palabra de moda, entonces el 2014 ha sido el año en el que los selfies se han convertido en un fenómeno cultural”, describe la revista TIME que ha seleccionado el monopie para selfies como uno de los mejores inventos del año.

Existen tres modelos de palos extensibles comercializados por una amplia variedad de marcas y el precio puede llegar hasta los 20 euros, como no superar los cinco. Los hay desde con mando a distancia para disparar, hasta los que se conectan al Bluetooth del teléfono, así como la versión más sencilla que consiste en un simple alargador. Todos comparten la misma finalidad: permitir a los usuarios colocar su teléfono inteligente más allá del alcance de su mano y conseguir así puntos de vista diferentes.  

Solo en diciembre, las ventas de los selfie sticks aumentaron más de un 400% en Amazon España. “Lo atribuimos a dos factores”, explica Amazon a La Vanguardia: “Por un lado, se trata de un producto de moda que confirma la irrupción del móvil en el mundo de la fotografía; y por el otro, es un artículo divertido que se disfruta en grupo, con un precio muy asequible, que lo convierte en el regalo perfecto para los "Amigos Invisibles" que se celebraron en esas fechas por todo el país”.

La compañía de comercio electrónico asegura que este fenómeno aún dura después de la campaña de Navidad. A día de hoy, el palo extensible para hacerse autofotos es el número siete en la categoría de fotografía y video, y se encuentra en la undécima posición en la tienda de electrónica, algo muy meritorio, teniendo en cuenta que compite con artículos como la pantalla táctil Kindle o los móviles Samsung Galaxy.

Incluso ya hay firmas que están experimentando más allá del palo para selfies. Leonovo presentaba la semana pasada en el CES 2015 un trípode motorizado que, gracias a un mando a distancia, se puede controlar para seleccionar el encuadre que más apetezca y hacer fotos sin necesidad de sostener el móvil ni tocar la pantalla.

“Son realmente muy útiles”, subraya Marcos, de Madrid, mientras Teresa, su novia, guarda el selfie stick fucsia que compraron hace unos días a un amigo, para irse de viaje a Barcelona. 

[Foto de la autora - fuente: www.lavanguardia.com]