Por Julio Moskovicz
La interrelación entre las sociedades argentinas y uruguayas es
histórica y permanente. Nada que suceda en Argentina deja de influenciar
en Uruguay (crisis económica, crisis politica, radicación uruguaya en
Argentina, acogida de refugiados politicos <<en ambos sentidos
>>, etc.) A esta realidad, no escapa la colectividad judia de
Montevideo, que, se puede decir, es hija de su similar de allende el
Plata.
No puede sorprender, pues, que los sucesos políticos de Argentina, de
los años 1900, repercutieron hondamente en Uruguay. El primero (no
sería el último) fueron las ondas expansivas provocadas por la Semana
Trágica (1919).
En Argentina, especialmente los anarquistas de ese tiempo, eran una
organización fuerte, con decenas de miles de afiliados y fuertemente
combativa. Sus banderas reclamaban el cese de la jornada de 12/15
horas, pago de horas extras, descanso semanal, etc. El sangriento
conflicto en la Metalúrgica Vasena encendió la violencia y de ahí nació
una fuerte represión.
Presentamos dos faces de tales acontecimientos, en lo que respecta a
las actitudes antijudias en el Rio de la Plata, en aquello hechos: en
Argentina y en Uruguay.
Uno
El primer “pogrom” en Argentina
El 6 de enero de 1919 comenzó la Semana Trágica. A las huelgas obreras se les opuso una violencia nunca antes vista, que culminó en el primer desborde antisemita de nuestra historia. (1)
La impotencia y las contradicciones del presidente Yrigoyen (1916-22)
lo indujo a reprimir. Pero la oligarquía (grandes empresarios y gran
prensa) desconfiaban de Yrigoyen y sí nació una fuerza parapolicial para
reprimir por su cuenta “con mayor eficiencia”. que los regulares.
Dominados por el pánico, casi de histeria, denunciaban la existencia de
soviets, aun dentro de la policía. Y, al estallar una huelga general
frigorífica, salieron los primeros grupos de “niños bien”, montados en
automóviles último modelo, a reprimir a los “subversivos” y a reclutar
rápidamente rompehuelgas.
Los “triunfos” alcanzados por esos jóvenes católico- nacionalistas
alentó la formación de dos organismos terroristas: “Orden Social” y
“Guardia Blanca”, transformados posteriormente en “Liga Patriótica
Argentina” y “Comité Pro Argentinidad”. Crearon brigadas armadas con el
visto bueno de la policía y el Ejército y el apoyo financiero de
Anchorena. Así nació la “Asociación Nacional del Trabajo”, presidida
por éste.
La “Liga Patriótica” –la más poderosa de esas organizaciones– se
“cubrió de gloria”, según La Prensa, en numerosos ataques locales y
reuniones obreras, provocando muertos y heridos, en el centro, el Puerto
y en Rosario.
Aquella ordalía represiva recién alcanzaría su máxima altitud durante
la “Semana Trágica” –6 al 13 de enero de 1919– que dejara como saldo
unos 700 muertos y más de 4000 heridos.
Los primeros crímenes se los acreditó la Policia, al disparar sobre
los huelguistas reunidos frente a la fábrica metalúrgica Vasena, pero el
miedo burgués hizo convocar al jefe de la 2ª División del Ejército,Gral.
Luis Dellepiane, para a asumir la responsabilidad ejecutiva de la
represión, dando vía libre a los “civiles” para que “colaboren”. Éstos
“civiles”, que después formarían la “Liga Patriótica” y otras, se habían
formado en el odio al inmigrante, especialmente los judíos, a quienes
acusaban de estar fomentando la “conspiración judeo-maximalista” para
“disolver la nacionalidad argentina”.
El ensañamiento de esos sectores vinculados con el poder contra los
trabajadores judíos durante la “Semana Trágica” produjo en América
latina el primer “pogrom” (devastación). Muchos lo consideraron una
suerte de venganza por la acción del joven judío Simon Radowitzky (2), diez años antes.
…Las acciones directas de la “Liga Patriótica” también encontraron
una sustentación teórico-filosófica que partía, principalmente, de los
sectores más reaccionarios de la Iglesia ( monseñor Miguel de Andrea, obispos Piaggio y Bustos (Córdoba).
El diario Di Idische Tzaitung alertaba: “Los curas comenzaron (su
inflama cruzada purificadora) en Corrientes y Junín; prosiguieron luego
sus sermones contra los socialistas y los judíos, con la ayuda de la
policía, por todo Buenos Aires y los suburbios. El domingo organizaron
una conferencia similar en la avenida Sáenz y Esquiú, rodeado por
policías y escoltados por bandidos locales armados".
Al llamado del Partido Socialista, los obreros abandonaron
espontáneamente las fábricas y los talleres para convertirse “en un mar
de olas humanas que rugió su amargura e indignación” (La Vanguardia).
Mientras tanto la policía, el Ejército y los “civiles” seguían matando.
El sistema, aterrorizado, demandaba la expulsión de los “extranjeros indeseables”, “controlar la inmigración”, etc. Se proponían campañas de exaltación del sentimiento nacional para oponerse a “esa runfla humana sin Dios, Patria ni ley” (según la “Guía del buen sentido nacional,” (Buenos Aires, 1920). Esos proyectos desembocaron en la creación de la “Liga Patriótica Argentina”, que lideró la propuesta de aplastar la conspiración judeo-maximalista, con el endoso del Jockey Club, el Círculo de Armas, Club del Progreso, Yacht Club, Círculo Militar, Damas Patricias, los obispos Piaggio y De Andrea y otros caballeros, reunidos en el Centro Naval.
La nueva entidad llenó la ciudad de afiches; sus proclamas eran
“Fuera los extranjeros”, “Mueran los maximalistas”, “Guerra al
anarquismo”, “Mueran los judíos”.
Mientras La Protesta, (ene 10 1919) editada clandestinamente, llamaba
a los trabajadores a armarse para enfrentar los crímenes del sistema,
la “Liga Patriótica” asaltaba los locales de Ecuador 359 y 645, donde
funcionaban los centros de los obreros panaderos y de los obreros
peleteros judíos. En la avenida Pueyrredón fue atacada la Asociación
Teatral Judía. Todo lo que había en los mencionados locales fue arrojado
a la calle y quemado. Los transeúntes, además, eran golpeados, mientras
la policía montada, en perfecta formación, observaba pasivamente.
Herman Schiller. (“Nueva Sion”, Buenos Aires, 1999) www.página12.com.ar/1999
………………
(1). Este artículo, por razones de espacio, está muy abreviado. Ver texto completo en
www.página12.com.ar/1999.
2) Simón Radowitzky (Ucrania, set. 10 1891- México, feb. 29 1956) fue
un militante obrero- anarquista, criado en Ekaterinoslav, procedentede
una familia obrera judia, radicado en Argentina en 1908. Autor del
famoso atentado contra el Jefe de Policia de Buenos Aires, Ramón Lorenzo
Falcón (14 nov. 1909), en respuesta a la sangrienta represión policial
fue condenado a prision perpetua en Ushuaia. Su figura cobraría valor
simbólico en las protestas obreras anarquistas. Tras una campaña del
diario “Critica”, abr. 1930, Yrigoyen le concede el indulto y lo
expulsa. Llega a Uruguay y es ayudado por el anarquismo uruguayo. El
gobierno de Gabriel Terra pretendió expulsarlo (dic. 1934) aplicando la
ley de extranjeros indeseables, terminando condenándolo a prisión en el
penal de la Isla de Flores. Su abogado fue el Dr. Emilio Frugoni. Con el
inicio de la Guerra Civil Española, Radowitzky se suma a las Brigadas
Internacionales. Tras la victoria del bando franquista, atraviesa los
Pirineos y es internado en un Campo; de allí iria finalmente a México,
donde el Consul del Uruguay, Angel Falco lo emplea en la Legación.
(Wikipedia)
Dos
El yishuv (colectividad judia de Montevideo) aumenta; ya hay más de cien familias y gran número de solteros llegados de los países vecinos (Argentina, Brasil). A fines de 1917 se fundó el Centro Cultural y se compraron unos cientos de libros. Se llevan a cabo actividades, celebración del 1º de Mayo, espectáculos teatrales, noches literarias, pic- nics.
“Se crea un subcomité para las víctimas de la Guerra (1914/18) y
en 1918 se organiza un acto de protesta contra los pogroms en Polonia y
Ucrania”
(El autor agrega detalles sobre un masivo acto en el Instituto Verdi
contra los pogroms, donde la asistencia de 800 personas (sic) escuchó a
los organizadores y a delegados de los Partidos Nacional y Colorado.
Agrega impresiones sobre el fuerte impacto que provocó el cese de la
guerra y remarca el entusiasmo provocado por la Declaración Balfour).
“La pujante actividad societaria avanzó hasta que un diario
vespertino local, en dic. 1918, (?) salió con llamativos titulares
informando que ..<< se descubrió un complot y su foco está en un
Centro Cultural Judio, en Galicia 1317 >>
“La Tribuna Popular” y “El Plata” informaron que rusos y judios
quieren apoderarse del Estado e introducir el Sistema Soviético. Se
presentó la Policia Secreta y arrestó a los obreros judios presentes y, tras encontrar el Registro de Socios, prosiguió con las detenciones, y al
anochecer la prensa ya publicaba que <<se logró arrestar a
trece cabecillas del complot; que entre ellos se encuentran el presidente y los comisarios políticos>>. De este modo fueron
detenidos el 80% de la población judia de Montevideo, jóvenes y
ancianos; se les arrestaba en sus domicilios y en la calle; también los
bajaron de los tranvías, tal como sucedió en “La Semana Trágica” de
Buenos Aires.
“En su primer recreo en la cárcel nos encontramos (S. Boimwasser
dixit) con casi todos los judios de Montevideo. Tras seis dias de
arresto, la mayoría de los detenidos fueron puestos en libertad. Los
catorce socios del Centro“Aurora”/“Hashajar”(?) tuvieron que recurrir a
un abogado, ocupándose del caso el Dr. Frugoni. Tras 17 días de arresto
fueron todos liberados. Entretanto se sustanció el juicio y se tuvieron
que presentar quince firmas de comerciantes judios establecidos,
quienes acreditaron que todos los detenidos gozaban de buen concepto.”
Liberado del arresto, constató (Boimwasser) cómo los primeros días
de enero provocaron un profundo clima de angustia (en la calle judia)
de Montevideo y Buenos Aires
“…desapareció la seguridad de los hogares y en aquellos momentos
cundió el desánimo y la sombra del eterno peregrinaje judio. Algunas
familias judias abandonaron Montevideo. Cada quien por su lado, se
apartó de la pujante vida societaria; flotaba la sensación que todo el
Yishuv se evaporó, desapareció y no pocos pensaron si no sería buena
cosa volver a la Argentina." (Fin del comentario de Boimwasser sobre
La Semana Tragica en Montevideo).
(Uruguaier iWO Yediot. Nº 3, set 1953 comentando “Un haz de recuerdos”, de Sh. Boimwasser)
………..
“El 11 de enero de 1919 la policia irrumpió en la reunión donde,
igual que en la vecina Argentina, arrestaron a los maximalistas. El Dr.
Frugoni se presenta ante el Juez de Crimen, quien sentenció 18 meses de
cárcel para los detenidos, los que después fueron liberados, en tanto
continuaba el proceso".
“El 13 de julio, en “Di Naie Tzait”, Federman escribe: “No estamos
aún liberados del proceso. La población judia (de Montevideo) está
asustada. Confiamos liberarnos en estos días, para proseguir con
nuestra labor normal alrededor de la biblioteca, el diario “Di Naie
Tzait”, etc.”
(Los diarios “El Día” (ene 1919), “La Tribuna Popular” y “El Plata”
(dic 1918/ene 1919) se hicieron eco especialmente en sus páginas de
este “complot”)
“El Sionismo en el Uruguay”, 1918-1943, pág. 74. (S. Boimwaser en Uruguaier IWO Bleter N° 3 , hace un relato aproximado).
[Fuente: www.diariojudio.com]
[Fuente: www.diariojudio.com]
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